Gracias a los esfuerzos conjuntos de la comunidad universitaria y a algunas apuestas que desde la Oficina se empezaron a implementar hace tres años, los campus de la U.N. Sede Medellín son espacios amigables con el medio ambiente y sus habitantes.

Así lo manifestó su directora, la profesora Carmen Elena Zapata Sánchez, quien considera que gracias a la gestión realizada desde la dependencia, hoy se pueden destacar cuatro grandes resultados.

El primer logro se refiere al diagnóstico para determinar cómo estaba la Sede en cuanto a la utilización de los recursos naturales, especialmente lo relacionado con agua, energía y residuos sólidos, en el que se encontró que aunque había muy buenas iniciativas, la desarticulación no permitía medir verdaderamente los impactos.

“Gracias a este diagnóstico y al apoyo de la administración actual, empezamos a involucrarnos en los proyectos de inversión del Plan de Acción para que cada uno identificara sus responsabilidades y ayudara en la articulación”, comentó la profesora Carmen Elena Zapata.

El segundo logro tiene que ver con la decisión de hacer una clasificación y descripción de los residuos generados por la comunidad y empezar a crear consciencia en la separación de la fuente. “Disminuimos el 30% de residuos entregados a Empresas Varias de 210m3 a 150m3 al mes y eso también aportó para ahorrar cerca de tres millones de pesos mensuales en costos de operación”, explicó Laura Giraldo, profesional especializada de la Oficina de Gestión Ambiental.

El tercero tiene que ver con una mayor visibilidad de uno de los orgullos de la Sede: el Arboretum y Palmetum. Éste se ha convertido en un oasis en el Valle de Aburrá gracias a la gran cantidad de árboles, flores y palmas que se mezclan con la diversa fauna que habita en los campus.

“Con este programa se ha mantenido una continua actualización, esto debido a los constantes cambios que se presentan como talas o nuevas siembras que se hacen con el acompañamiento del profesor León Morales. Las visitas guiadas ambientales también han sido un gran éxito, el año pasado tuvimos más de 600, hemos acompañado el programa de Niños Científicos U.N., la observación de aves con la Sociedad Antioqueña de Ornitología y otras actividades”, agregó la Directora.

El cuarto logro tiene que ver con el manejo de residuos, pues se hizo un buen uso y segmentación, se caracterizó su proveniencia y la mejor manera de acoplarlo sin causar traumatismos en la Institución. También se eliminaron dos pasivos ambientales (que causaban o podrían causar afectaciones ambientales al entorno) como algunos residuos peligrosos en un antiguo edificio en Ingeominas y el tanque de gasolina del Campus El Río.

De igual forma, la Oficina trabaja junto al Área Metropolitana en la elaboración de un manual de compras sostenibles, con el fin de sensibilizar a cada dependencia para que sus bienes de consumo y futuras compras sean razonables e idóneas en su uso.

Como meta para terminar el trienio se espera poner en funcionamiento el sistema de compostaje de la Sede, en el cual se tratarán aproximadamente 3.5 toneladas de residuos orgánicos semanales y de los cuales se obtendrá una tonelada y media al cabo de nueve semanas para utilizar en los diferentes campus y estaciones agrarias de la Universidad, aplicando así insumos naturales en lugar de químicos.

“Con respecto a los Planes de Manejo Integral del Agua y de Energía, desarrollados en un 100% en la Sede, solo queda sensibilizar a la comunidad universitaria sobre la importancia de estos recursos y su impacto en el medio ambiente”, concluyó Laura Giraldo.

26 de febrero de 2018