¿Sabías que el material plástico de un solo uso no solo contamina el medio ambiente, sino que, además, puede acarrear afectaciones para la salud humana? Consciente de ello, el Consejo de Sede de la Universidad Nacional de Colombia en Medellín estableció una directriz para llevar a cabo estrategias que permitan generar condiciones de campus sostenible como la reducción en el consumo de este material.

En esa medida, explicó Johan Zuluaga Franco, director financiero y administrativo de la Sede, “hoy hablamos de una política de compras sostenibles que refiere puntualmente a la adquisición de insumos de aseo y papelería amigables con el medio ambiente”. A ello, agregó, se sumó en 2019 la determinación de “no adquirir más elementos desechables plásticos para un solo uso como vasos, platos, pitillos, mezcladores, cubiertos y demás; los queremos reemplazar por elementos menos contaminantes”.

La estrategia de sostenibilidad ambiental de la Universidad está encaminada a generar una cultura en la que todos los miembros de la comunidad universitaria asuman un compromiso individual que le aporte al colectivo.

“Poder emprender acciones desde la cotidianidad en torno a esa protección del medio ambiente es uno de los focos en nuestro Plan de Acción de Sede, enmarcado en el Plan Global de Desarrollo, es por eso por lo que pensamos en iniciativas no restrictivas, sino que inviten a la comunidad universitaria a sumarse al cambio y a contribuir desde cada uno a la solución de un problema que es mundial”, destacó el profesor Juan Camilo Restrepo, vicerrector de la Sede.

Un mug viajero

Como un aporte a la generación de esa cultura, el Sistema Integrado de Gestión Académico Administrativo y Ambiental (SIGA) entregará a los funcionarios de la Institución un vaso viajero. “La idea es que se vuelva un compañero infaltable en clases, reuniones, oficinas, en fin, que a donde vayamos, vaya con nosotros. Se busca contribuir al propósito de no usar más material desechable en nuestros campus”, dijo Manuela Hincapié Parra, profesional de apoyo de la Sección de Calidad, adscrita al SIGA.

Fabricado en material resistente que no se mancha y que conserva la temperatura de la bebida, el mug, además lleva el sello institucional como una manera de reforzar el compromiso de todos los funcionarios con la institución.

“Haremos entregas personalizadas por dependencias y facultades, pues la intención no es solo entregar el mug sino también socializar con la comunidad aspectos como los compromisos SIGA; de esa manera también esperamos sumar a la generación de una cultura de la sostenibilidad”, precisó Hincapié Parra.

Otras estrategias

Entre las iniciativas lideradas por la Oficina de Gestión Ambiental de la Sede para migrar hacia la sostenibilidad, la funcionaria Laura Giraldo, destacó que en los contratos con cafeterías se incorporó una cláusula que restringe el uso de materiales como poliestireno expandido y plásticos PVC (policloruro de vinilo); “además, en cuanto a pitillos y mezcladores, se les sugirió migrar hacia materiales de papel o madera que son más amigables”.

La UNAL, además, hace parte del G8 universidades, alianza con la que, entre otros temas que respectan al devenir de las ocho instituciones que lo conforman, se estableció un compromiso con la sostenibilidad mediante el cual se firmó el convenio universidades libres de plásticos que pretende, justamente, erradicar el uso de este material.

Para el Vicerrector de la Sede, la Universidad tiene la responsabilidad de estar a la vanguardia no sólo en términos de desarrollo del conocimiento sino también de transformaciones sociales y, en ese orden es primordial procurar entre la comunidad universitaria, la concientización sobre el cuidado del medio ambiente.

“De ahí que le queremos aportar también a alternativas como el uso de energía más limpia por medio de paneles solares, siembra de árboles, la adquisición de vehículos eléctricos y la implementación de electrolineras en los tres campus para quienes se desplacen en vehículos eléctricos (automóviles, bicicletas o patinetas), entre otras, lo más importante es que reconocemos que el escenario es muy amplio y retador”, concluyó el profesor Juan Camilo Restrepo.

2 de diciembre de 2019