Escudo de la República de Colombia
A- A A+
Foto: cortesía Daniel Marín Vanegas.

A los investigadores de la UNAL Medellín, Isabella Taborda Llano y Daniel Marín Vanegas, Les pareció increíble cuando se enteraron del hecho, pero fue, sin duda, una de las pruebas más fehacientes de fallas en sistemas de gestión de proyectos de viviendas que estudiaron en distintas zonas de la ciudad. Se ríen contándolo, pero lejos de ser anécdota, presenciarlo les suscitó reflexiones a nivel profesional, aun siendo estudiantes de pregrado.
---


Isabella y Daniel, quienes son estudiantes de Construcción de la Facultad de Arquitectura, analizaron el diseño de intervención en sistemas de gestión y sostenibilidad —en las dimensiones ambiental, cultural, económica, institucional y social— de proyectos de Viviendas de Interés Social (VIS), de Interés Prioritario (VIP), y de Interés Prioritario para Ahorradores (VIPA) a partir de trabajos académicos para indagar qué pasa cuando los usuarios ocupan las edificaciones que les son entregadas.

Encontraron, entre otros resultados visibles sobre los cambios de uso, tanto módulos destinados para la recolección de residuos transformados en locales comerciales, como un apartamento que fue convertido por sus propietarios en acopio de reciclaje, dado que ellos se dedicaban a esa actividad incluso antes de recibir la vivienda. También hubo un caso de un caballo que observaron en el balcón del espacio habitacional VIP de un campesino, quien optó por la opción ante la imposibilidad de cuidar el animal en un espacio de campo idóneo.

En proyectos VIS y VIP como el proyecto Aurora de la Libertad, ubicado en el barrio La Aurora de Ciudadela Nuevo Occidente, a una de las viviendas le modificaron el espacio para crear un balcón improvisado, donde originalmente solo había espacio para una ventana, mientras que en una zona de Pedregal Bajo de la misma ciudadela, a pesar de estar ubicada en zona de reserva ambiental en la que se prohíben las intervenciones antrópicas, algunos residentes provenientes del campo cultivaron maíz en un área no permitida.

Lo que encontraron, afirma Daniel, “son resultados del fenómeno de la ocupación; una dinámica que transforma el hábitat, ocasiona problemas culturales o de convivencia, o genera cambios de uso cuando no se contempla desde el diseño. El Gobierno entrega los edificios y muchas veces se desentiende. Esto es evidencia de que desde la ciudad se niegan realidades como las de lo rural y de cómo planeando desde las oficinas se cree que se diseña bien, pero se hace bajo una mirada sesgada de lo urbano”.

“No se tienen en cuenta las prácticas socio-culturales”, indican los investigadores en el artículo derivado de la ponencia El problema de la sostenibilidad en la industrialización de la vivienda social y sus modelos de gestión: el caso de viviendas de interés social en Medellín, que presentaron en el I Congreso sobre Innovación y Sostenibilidad en la vivienda social, realizado en Granada (España) en noviembre de 2021.

En el mismo texto indican que hay casos que evidencian corrupción, como el del proyecto Ciudad del Este, ubicado en el barrio Buenos Aires, que inició en 2014 y su culminación estaba prevista para el 2017. Sin embargo, a la fecha continúa en construcción luego de que la obra fuera suspendida en 2018. De acuerdo con los autores, la situación puede darse “debido a las pocas estrategias de vigilancia de recursos para adquisición de financiamiento y ejecución de VIS y de VIP”.

Con respecto a la concepción de la sostenibilidad en los modelos de gestión hallaron que esta está marcada hacia la tendencia económica, principalmente. Adicionalmente, aclaran que la gestión de la ocupación y la adaptación es inexistente en Colombia. Isabella lo explica: “Es muy evidente porque se tiende a industrializar, se construye masivamente y solo se analiza numéricamente o se atiende a necesidades gubernamentales particulares”.

De ahí que las transformaciones realizadas por los habitantes beneficiarios de las viviendas, tengan en algún sentido, un asiento derivado de “la aplicación de enfoques mercantilistas que no contemplan el hábitat desde su perspectiva multidimensional”, como llaman la atención en el artículo los investigadores.


Así lo hicieron

Inicialmente sistematizaron los proyectos por tipo, fuente de recursos y estados de desarrollo. Consultaron varias tesis de maestrías y doctorados en las que se tomaba como referencia la guía de buenas prácticas en los modelos de gestión desarrollada por el Project Management Institute, denominada PMBOK, que es de uso internacional y plantea cinco etapas: inicio, planificación, ejecución, control y cierre; sin incluir la de ocupación.

Emplearon otros datos obtenidos en salidas de campo, bases de datos y entrevistas realizadas previamente como parte de la Investigación Modelo pedagógico para la enseñanza del diseño de intervención del hábitat en programas de educación superior, cuyo propósito es proporcionar a la UNAL Medellín un curso interdisciplinar permanente enfocado al diseño idóneo de proyectos de hábitat urbanos y rurales que incluye varios ejes como son, precisamente, los modelos de gestión.

La iniciativa es comprender mejor el hábitat, y de ella son artífices junto con los profesores Jorge William Montoya Santamaría, de la Facultad de Ciencias Humanas y Económicas, y el profesor John Muñoz Echavarría, de la Facultad de Arquitectura.


Lecciones

La convicción que le queda a Isabella después de realizar el trabajo es la pertinencia de propender por el equilibrio entre el conocimiento técnico y la integridad personal. “En un país como Colombia nosotros somos los hacedores del cambio, tenemos todo en nuestras manos”, afirma.

Por su parte, Daniel reflexiona sobre la necesidad de la ética en el ejercicio profesional y reafirmó que “hay comunidades que valoran más las construcciones en arquitectura vernácula como por ejemplo en bambú o en tierra y tener contacto con su cultura, que una construcción en ladrillo y concreto como las que brinda el estado como única opción de subsidio”.

Como profesionales e incluso desde la academia, añade, es fundamental tener conciencia de los impactos que tienen esos proyectos en la diversidad cultural del país: “hay particularidades que no se ven solventadas con la entrega de una vivienda”. Para Isabella también es primordial tener en cuenta los contextos del conflicto armado, los desplazamientos y la gestión de desastres.

(FIN/KGG)

21 de febrero de 2022