Escudo de la República de Colombia
A- A A+
Los próximos gobernantes locales deben velar por un mandato con perspectiva nacional, según analista. Foto: tomada de onx.la/2ab62

 

A pesar del proceso de descentralización y de autonomía territorial que se surtió a partir de 1991 después de la actual Constitución, Colombia sigue siendo una república unitaria, y tanto los planes de desarrollo como las leyes y los actos administrativos están supeditados al nivel nacional, como lo señala Juan Antonio Zornoza Bonilla, profesor del Departamento de Ciencia Política de la Facultad de Ciencias Humanas y Económicas de la UNAL Medellín, a quien, en ese sentido, le inquieta el riesgo de ruptura de las relaciones gubernamentales entre los niveles locales y el nacional.

Eso, dice, “significa que el Gobierno central prima sobre las decisiones de los niveles territoriales, regionales y locales. Si hay enfrentamiento entre un alcalde o un gobernador con el presidente, claramente quienes llevan toda la de perder son los niveles territoriales y por lo tanto podrían quedarse, primero que adecuar su normatividad y segundo sus presupuestos”.

Se refiere específicamente al caso de Medellín, puesto que el aspirante a la Alcaldía, Federico Gutiérrez, el más opcionado según encuestas, se enfrentó a Gustavo Petro durante la campaña presidencial en la que ambos fueron candidatos. La tensión es entonces un riesgo que plantea el profesor, teniendo en cuenta que hay Megaproyectos como el del Tren del Río o el Metro de la 80, que son financiados en aproximadamente un 70% por el gobierno nacional.

Continuando con el mismo caso, Andrea Arango Gutiérrez, docente de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad de Antioquia, expone que en la pasada contienda presidencial Gustavo Petro encarnó la idea del cambio y su triunfo fue muy reñido en Antioquia, uno de los departamentos que insistió en el continuismo, es decir, que simpatizó con Federico Gutiérrez. Para ella, ese contexto es clave para entender lo que está en juego en las próximas elecciones territoriales en el departamento, que ha sido mayoritariamente de derecha, “y que obviamente se va a ver reflejado”, a lo que añade que se suma el hecho de que la presidencia actual está siendo cuestionada.

Definitivamente, menciona, uno de los puntos de quiebre con la coyuntura en la ciudad es el rompimiento de relaciones con el Grupo Empresarial Antioqueño por lo sucedido con la junta de Empresas Públicas de Medellín (EPM) o con el caso de Une Tigo sobre las dudas de lo que se va hacer en el espectro 5G. Esos son asuntos que, a su criterio, los próximos dirigentes deben volver a poner en consideración y que también debe retomar la opinión pública.

Otro de los tópicos que aborda es el que respecta al alcance de excombatientes aspirante a cargos de elección popular, sobre todo del Partido Comunes, y acerca del cual expresa que, en este caso y dadas las circunstancias sociales, “es un voto débil cada vez más débil, y eso es preocupante, porque da cuenta que no tienen la legitimidad ni la base necesaria para lograr la representación que están buscan”. Por lo menos, dice, ese es el panorama en Antioquia.

Los temas que ha planteado hasta el momento son urbanos y del departamento. Sin embargo, también hace alusión a la ruralidad del resto del país. Lo que considera es que la conectividad con las urbes debe ser primordial y que deben fortalecerse las vías terciarias con el propósito de propender por el desarrollo del campo y para que sea capaz de competir en el comercio internacional, así como para disminuir la intermediación de los precios de los alimentos.

Las próximas elecciones territoriales serán como un pulso para medir el mapa de la representación política en las alcaldías, gobernaciones, asambleas y concejos, como lo expresa José Alejandro Cepeda Jiménez, profesor de la Facultad de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de la Pontificia Universidad Javeriana. Dice que “lo que vamos a ver es a dónde quieren dirigirse esas entidades”. En ese marco, añade, “se puede dar un oxígeno, unos apoyos, la lectura de sinergia o, por lo contrario, perder posibilidades de administraciones locales para el proyecto político de izquierda”.


Retos

Los desafíos de todos los gobernantes colombianos, de todos los niveles, empiezan con el empleo, según el docente Zornoza Bonilla, para quien ese es el principal y el más claro, y aunque expone que, si bien la tasa de desempleo ha disminuido en el último año por debajo de un dígito, los mandatarios municipales deben desarrollar programas a nivel de obras públicas, de contratación estatal y de promoción del empleo a través del sector privado, con alianzas con los gremios y empresas.

Y así como considera que es importante reducir el desempleo, también lo es reducir la inseguridad. Menciona que son preocupantes los niveles de hurtos y homicidios registrados en Bogotá, Cali, Medellín y Barranquilla, así como los del Eje Cafetero y los Santanderes.
Un reto más, y que aplica sobre todo en las ciudades principales, es la movilidad, “en la que todas encuentran dificultad. La única ciudad que tiene un sistema de transporte público integrado completo es Medellín, pero eso no significa que su tráfico vehicular sea fluido, al contrario”, expone.


¿Cómo deben ser los nuevos gobernantes locales?


Para el profesor Zornoza Bonilla, los próximos gobernantes territoriales deben apostarle a gestionar el conflicto a través del diálogo. Por otro lado, acerca de las reformas menciona que son proyectos a los que le apuestan habitualmente los gobiernos.

“Necesitamos gobernadores que estén a la altura de los asuntos más importantes como lo son la infraestructura o el cambio climático, que es un tema prioritario sobre todo en un país como Colombia. Por supuesto también hay que cuidar los temas de salud, educación y la seguridad”, afirma el docente Cepeda Jiménez.

Su conclusión es que lo más relevante para el académico es que los colombianos “elijan gente con experiencia, con discursividad política, con capacidad de gobierno. Que no sean solo figuras clientelares aspirando a mirar su solo su terruño, sino que tengan un diálogo con el país, que miren hacia dónde se orienta y de manera global, porque así son los problemas que estamos viviendo”.

(FIN/KGG)

23 de octubre de 2023