A propósito de la 12a Fiesta del Libro y la Cultura que se realiza en Medellín hasta hoy, quisimos conocer qué tanto y de qué manera leen los estudiantes, profesores, egresados y funcionarios administrativos de la Sede.

Según datos suministrados por la División de Bibliotecas y la Librería Interuniversitaria de la U.N. Sede Medellín, los jóvenes de la Institución son quienes más consumen libros y los prefieren físicos. Otras formas de lectura, como los juegos de rol y videojuegos, ganan cada vez más terreno.

“A pesar de que se cree que ha disminuido mucho el interés por la lectura, pienso que lo que en realidad ha cambiado es la forma de leer, pues es evidente que se ha diversificado, en junio de este año realizamos un taller de innovación con alrededor de 150 usuarios que pretendía revisar los servicios que ofrecemos y ajustarlos a lo que ellos en realidad esperan recibir”, indicó Alba Nelly Alzate Tabares, jefa de la Sección de Servicios de la División de Bibliotecas de la Sede. Las conclusiones del taller arrojaron que había que enfocar esfuerzos en nuevas estrategias de promoción de lectura con el fin de cautivar a nuevos lectores.

A la opinión de Alzate Tabares se suma la de Martha Isabel Múnera Escobar, de la Librería Interuniversitaria en la Sede Medellín, al considerar que a este espacio, ubicado en el primer piso del bloque 16, son los jóvenes quienes más acuden a preguntar y comprar ejemplares.

“En lo que va corrido del año se han vendido 3.942 libros, una cifra importante si se tiene en cuenta que gran parte de los compradores corresponde a estudiantes, quienes muestran gran interés por las sagas y libros de moda”, comentó Múnera.

Los textos que hoy más se consultan en la tienda son Homo Deus y De animales a Dioses del autor israelí Yuval Noah Harari e Historia mínima de Colombia del historiador, profesor y periodista colombiano, Jorge Orlando Melo.

“Resulta particular que las sagas, libros que han dado inspiración a películas o que complementan las series televisivas y de internet se vendan mucho y que los libros de autoayuda o superación personal sean los de menos consulta por parte de la comunidad universitaria”, resaltó Martha Isabel Múnera.

En relación con el libro electrónico, la comunidad universitaria aún es reacia a estas tecnologías o tal vez un poco más romántica en cuanto al papel. En lo que va del año se han realizado 8.212 consultas en los libros electrónicos y las bases de datos disponibles en las bibliotecas de la Sede.

Una cifra relativamente baja si se compara con los 181.499 textos que la División de Bibliotecas ha prestado en lo corrido del año, números que según los expertos son muy buenos.

“En una comunidad de cerca de 12 mil personas es una cifra de préstamo muy significativa que demuestra que las personas siguen teniendo un gusto por el texto físico, por sentirlo, olerlo, palparlo, interactuar con él, el papel sigue ganándole por mucho a los formatos digitales”, agregó Alba Nelly Alzate.

Nuevas opciones, nuevas formas de lectura

La División de Bibliotecas de la Sede se ha percatado de que especialmente, las nuevas generaciones, tienen otras formas de leer e interactuar con la literatura, por lo que han decidido implementar nuevas estrategias de lectura que han sido acogidas satisfactoriamente por la comunidad universitaria.

Dentro de estas se encuentran los clubes de videojuegos, de comics, de series de tv, de música, el club de lectura en varios idiomas y club de manga.

“Estos espacios posibilitan generar encuentros y construir comunidades de usuarios con intereses específicos, además de ser otras formas de lectura. Tomando como ejemplo los videojuegos, está el caso de un estudiante que manifestó haber aprendido sobre geografía y sobre diferentes roles que se deben asumir de acuerdo a una determinada situación”, precisó Alzate.

Aparte de jugar, el club ofrece la posibilidad de compartir con otros los aprendizajes que han tenido con estos dispositivos, útiles para su vida personal y académica.

“Esto es bueno, pero como promotor de lectura uno nunca está satisfecho, pues la idea es que todas las personas de nuestra comunidad universitaria, especialmente los estudiantes, entiendan la importancia de leer más allá de los textos académicos, queremos excelentes ingenieros con un discurso y amplio bagaje”, comentó Hugo Alejandro Velásquez, auxiliar de referencia encargado de lectura en la Biblioteca Efe Gómez.

Según datos de la Encuesta Nacional de Lectura, ENLEC, primer estudio especializado y diseñado para medir hábitos de lectura, escritura, asistencia a bibliotecas de personas de cinco años y más en Colombia, los nacionales leen en promedio 5,1 libros al año.

¿Qué se puede leer si se dejan por un momento las redes sociales?

Con base en un estudio internacional, la División de Bibliotecas de la Sede Medellín hizo un análisis propio sobre qué libros y cuántos pueden ser leídos si se dedicara el mismo tiempo que se pasa en las redes sociales o hablando por celular. No es una satanización de los medios, sino una invitación a leer.
Según el estudio, los jóvenes invierten en promedio, más de 20 horas en Instagram, Facebook y Twitter. Si se redujera el consumo de estas a la mitad, los integrantes de la Sede Medellín podrían leer al mes La Metamorfosis de Franz Kafka, Sexo y Saxofón de Gonzalo Arango, El Extranjero de Albert Camus y En las montañas de la locura de Howard Phillips Lovecraft.

17 de septiembre de 2018