Esta importante ceremonia se desarrolló en el marco de la Semana Universitaria 2022 - UNAL 155 años, donde se reconoció la labor de profesores y empleados destacados por sus valiosos aportes a la Institución, la región y el país.
Las Distinciones son un homenaje a los méritos académicos e investigativos excepcionales, al trabajo constante, comprometido y responsable del personal docente y administrativo, que contribuye al desarrollo de la ciencia, el arte y la cultura del país, a través del proyecto científico y colectivo de nación.
En el caso de los empleados administrativos se entregaron 103 menciones por año de servicios, tres Medallas de Sede Alejandro López, seis menciones honoríficas y una Medalla Manuel Ancízar, la distinción más alta que puede recibir un empleado de la Universidad Nacional de Colombia.
Entretanto, fueron 22 docentes los que recibieron este reconocimiento, en categorías como mérito universitario, otorgada por el Consejo Superior Universitario, Excelencia académica, extensión solidaria y profesor honorario, otorgadas por el Consejo de Sede y Docencia excepcional e Investigación meritoria, conferidas por cada una de las facultades de la Sede.
Ser empleado UNAL: un reconocimiento a los años de servicio
Las distinciones a los empleados destacados de la Universidad reconocieron los años de servicio de quienes llevan 10, 15, 20, 25, 30, 35 y 40 años aportando con su trabajo honesto a la comunidad universitaria, facilitando día a día los procesos en la Sede.
“La excelencia es una condición que se teje cada día y eso es lo que hacen ustedes en la UNAL, el trabajo diario requiere de una alta exigencia personal que implica cultivar la inteligencia, la disciplina y el compromiso en cumplir la misión de entregar los mejores resultados siempre, que en nuestro caso contribuyen a ser la mejor universidad del país. La excelencia revela un temple que es propio de los valientes, por eso estamos aquí para reconocer su grandeza personal, y decirles gracias por su invaluable aporte”, expresó Juan Camilo Restrepo, vicerrector de Sede.
Para Fernando Arenas, laboratorista del CIMEX y uno de los empleados con más trayectoria en la Sede “este reconocimiento es por toda una vida de servicio, es muy agradable estar aquí, tanto que el tiempo pasa y no se siente, y cuando llegue el momento de irme será muy triste, porque son 40 años de compartir con estudiantes y compañeros. Verlos avanzar en sus carreras y profesiones es algo de lo que estoy muy agradecido”.
Una de las empleadas exaltadas con la distinción honoraria fue Lady Viviana Uribe Tamayo, auxiliar administrativa en la sección de Gestión Documental, para quien este reconocimiento “significa el fruto del trabajo que hemos realizado no de manera individual sino grupal con todas las personas que he tenido la oportunidad de conocer. Les diría a los nuevos empleados que no se queden quietos y que aprovechen todas las opciones que tiene la Universidad para formarnos, crecer y avanzar”.
La máxima distinción que entrega la UNAL es la medalla Manuel Ancízar, que este año fue para Dora Elena Orrego Mejía, funcionaria de la Dirección de Investigación y Extensión de la Sede, por su intachable hoja de vida, responsabilidad en el ejercicio de sus funciones, e identificación con los intereses de la Universidad:
“A mí me parece que esta medalla nos ayuda a ser mejores en nuestra labor, a no solo enfocarnos en la parte profesional, sino también en lo humano, que es tan vital y que en muchos lugares se olvida. Es maravilloso estar en esta Institución con un campus tan hermoso, con conciencia del medio ambiente y de protección de los animales, con compañeros incondicionales que me han motivado a sentirme feliz en la labor que desempeño, me han ayudado en los momentos de duda y me han tendido la mano para levantarme con entusiasmo”, afirmó Orrego Mejía.
Incentivar el buen ejercicio de la docencia
En la ceremonia para los docentes, los decanos de las cinco facultades fueron los encargados de hacerles entrega de las distinciones a los profesores que gracias a sus herramientas pedagógicas, investigativas y humanas han logrado posicionarse como ejemplo del deber ser en el mundo académico.
“Hoy quisiera hablar del papel tan importante que tienen los maestros en tiempos de crisis, desde la fundación de la Universidad hace 155 años hemos requerido maestros de gran capacidad intelectual, de alta formación disciplinar y con vocación de enseñar mediante su experiencia de vida y ejemplo ciudadano. Nuestros maestros dejan una huella profunda en los estudiantes, gracias a sus palabras hemos intentado construir un mejor futuro para este país. A todos los profesores hoy premiados, un gran abrazo y agradecimiento”, expresó la rectora Dolly Montoya Castaño, a través de un enlace con la ceremonia realizada a nivel nacional.
El Consejo Superior Universitario escogió a dos docentes de la Sede Medellín para ser condecorados con la medalla al Mérito Universitario, que reconoce a profesores activos, asociados o vinculados en la carrera profesoral universitaria durante 15 años como mínimo, y cuya trayectoria y producción académica sean ejemplares y dignas de exaltación ante la comunidad universitaria.
“Esta distinción del Mérito Universitario significa un tiempo de mi vida dedicado y consagrado al lago que amo muchísimo que es la academia, la docencia, la investigación y la extensión, y ante todo a la gratitud inmensa que le tengo a la Universidad, a mis estudiantes, colegas, empleados y directivas”, dijo Mónica Reinartz Estrada, docente del departamento de Producción Animal de la Facultad de Ciencias Agrarias y ganadora de esta medalla en el área de Ingenierías.
Una de las categorías reconocidas es la de Profesor honorario, que resalta aquellos docentes de otras instituciones que tejen relaciones fructíferas con la UNAL desde diferentes frentes como la investigación y la extensión. En esta oportunidad una de las personas condecoradas fue Rodrigo Alejandro Hidalgo Dattwyler, docente de la Facultad de Arquitectura de la UNAL Medellín y de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Para él esta distinción “es un reconocimiento extraordinario en mi labor docente, que se refleja en una colaboración y una relación larga con la sede Medellín, que siempre me ha acogido como si fuera mi casa, con un ambiente de respeto y dedicación por la vida académica e investigativa”.
Cada Consejo de Facultad escogió a los maestros más destacados en las categorías de docencia excepcional e investigación meritoria, siendo los respectivos decanos los encargados de entregar las distinciones.
“Esta distinción es muy valiosa para mí, pues en estos cuatro años que llevo en la Universidad he tratado de darle lo mejor que tengo a los estudiantes, lo que se ve reflejado en sus procesos académicos y en la experiencia profesional que he adquirido en esta Institución, además es todo un honor ser parte de los docentes seleccionados por la Facultad de Ciencias para este reconocimiento”, concluyó Mauricio Alejandro Mazo Lopera, docente de la Escuela de Estadística y ganador en la categoría de docencia excepcional.
Los homenajeados podrán ver las fotografías de los eventos en: https://bit.ly/Distinciones2022
(FIN/DQH)
3 de octubre de 2022