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Uno de los trabajos más arduos de la dependencia este año, fue el proceso de vinculación de los empleados ganadores del Concurso Público de Méritos 2018-2019, quienes necesitaron un acompañamiento especial en su adaptación.

 

Esta dependencia ha sido testigo de primera mano de los cambios en las dinámicas de la Universidad, reflejando en su trabajo una gran capacidad de adaptación a la virtualidad.

Durante este año las secciones de Personal Académico, Administrativo, Seguridad y Salud en el trabajo y Salarial y Prestacional, construyeron acciones para sacarle el mayor provecho a la coyuntura.

Liliana Patiño, jefe de la Dirección de Personal Académico y Administrativo, asegura que: “nos tocó reinventarnos. La presencialidad en nuestros trámites era vital, pero los empleados han respondido muy bien a los cambios, durante este año todo ha sido ganancia y aprendizaje, y considero que a modo de balance general hemos atendido satisfactoriamente a los requerimientos de los funcionarios”.

Cifras de gestión

Desde la elaboración y aprobación de protocolos de bioseguridad, hasta el acompañamiento directo al proceso de vinculación de nuevos empleados, la Dirección de Personal Académico y Administrativo deja cifras importantes de su gestión del talento humano en la Institución:

➔ 6 vinculaciones de docentes de planta ganadores de concursos profesorales.
➔ 2 jornadas de inducción virtual a docentes.
➔ 65 vinculaciones de personal académico para posgrado e intersemestrales.
➔ 36 vinculaciones de estudiantes auxiliares para posgrado e intersemestrales.
➔ 94 posesiones de funcionarios por el Concurso Público de Méritos.
➔ 215 vinculaciones de profesores ocasionales para el periodo 2020-1S.
➔ 311 vinculaciones de estudiantes auxiliares, monitores y becarios.
➔ 4 jornadas de capacitación virtual para ganadores del Concurso Público de Méritos.
➔ 50 reuniones virtuales de apoyo psicológico a personal docente y administrativo.
➔ 40 capacitaciones de: adaptación al cambio, asuntos de género, competencias laborales, compromiso ético, y manejo del estrés.
➔ 413 vinculaciones al sistema general de seguridad social.
➔ 386 liquidaciones de prestaciones sociales a funcionarios.
➔ 224 capacitaciones sobre temas preventivos de seguridad y salud en el trabajo.
➔ 198 estándares de seguridad documentados, que establece qué procedimiento seguir para estar seguro en el puesto de trabajo.
➔ 10 protocolos de bioseguridad de la Sede aprobados por la dependencia.
➔ 74 protocolos de bioseguridad específicos para laboratorios aprobados por la dependencia.
➔ 215 kits de protección entregados a funcionarios que ingresan a los campus.

Mejoras, retos y proyecciones

Para la Dirección de Personal Académico y Administrativo la gestión durante el 2020 también sacó a flote diferentes puntos en los cuales enfocará su trabajo en los años venideros, siempre buscando el mejoramiento continuo de los pilares que sostienen el funcionamiento de la Universidad.

Para mejorar el relacionamiento con los docentes, esperan encontrar nuevos temas de interés para las capacitaciones técnicas y humanas que ofrecen, y a su vez ampliar la participación, con la ayuda de profesores que sirvan de voz a voz y logren cautivar a sus colegas.

En la búsqueda de condiciones más favorables de trabajo administrativo, Liliana Patiño asegura que, “en asocio con la Dirección Nacional de Personal y la Vicerrectoría de Sede se espera adelantar un proceso de diagnóstico de las condiciones familiares y sociales de los empleados para determinar un futuro seguro en la modalidad de teletrabajo, para los que su labor lo permita. En algunos casos con un periodo de alternancia de tres días en casa y dos en la oficina”.

Una apuesta a mediano plazo es digitalizar las hojas de vida de los funcionarios y las historias ocupacionales, pues se encuentran en formato físico y bajo las demandas actuales de la virtualidad, ha dificultado algunos procesos.

“Para el 2021 y 2022 queremos enfocarnos no tanto en la tramitología, sino en el deber ser de las direcciones de personal: la gestión del talento humano, el desarrollo de las personas en su nivel técnico y profesional, y compartir y fortalecer la cultura organizacional basada en nuestros valores éticos”, concluye Liliana Patiño.

(FIN/DQH)

5 de octubre de 2020